Por fin había llegado el momento
que tanto había deseado Martina. Había recibido la carta dónde encontraría el
camino para ir a un lugar determinado y allí encontrar un pequeño tesoro que le
quería mostrar su profesora. Martina estaba muy emocionada porque todos sus
compañeros de clase, ya la habían recibido, pero cada uno de ellos debía ir a
un sitio diferente. Martina estaba muy preocupada, ya que tenía miedo de
perderse, pero por otro lado pensaba que con las indicaciones de su seño seguro
que eso no pasaba. Al día siguiente cogió su carta y comenzó su camino. La
carta decía así:
“Al salir
del cole deberemos ir hacia el oeste, orientándonos según la aplicación de
móvil “Brújula Smart Compass” y así encontraremos la calle que tiene como
nombre una de las islas que componen las Baleares. Después de bajar por ella, tenemos
que dirigirnos hacia la derecha, entrando en la calle con el nombre de un doctor
pero no debes olvidarte de ella, porque después de atravesar una rotonda tienes
que continuar por ella. Cuando la hayas
subido, tendrás que dar con la calle de una santa que su nombre te será
familiar. A continuación deberás girar a la derecha, encontrando con una calle
en la que su nombre también aparece en un sitio que vas de lunes a viernes y en
el que aprendes muchísimas cosas.
Después de
ello giramos a la izquierda en la calle Fúcar, y a continuación estate muy
atenta, porque tendrás que continuar por la calle que tiene como nombre a la
persona que murió y resucitó para salvarnos encontrando la plaza que lleva su
nombre.
Ya no queda
nada para llegar Martina, ¡Lo estás haciendo genial! Ahora deberás girar a la
derecha y allí encontrarás la calle que toma como nombre al autor de la novela
española más importante, “El Quijote”. Cuando la atravieses, deberás girar
hacia la derecha encontrando una plaza con nombre de realeza y clases altas de
la sociedad, no olvides utilizar el “Street view” para verla y reconocerla. Ya
solo nos queda girar a la izquierda y encontrar una calle con el nombre de un
museo. Unos metros más adelante verás tu destino… un lugar muy particular.
Espero que
te haya gustado esta pequeña sorpresa.
Fdo: Tu seño"
¡Ahí estaba! Martina no se lo podía
creer. Al llegar la recibieron en la puerta
y la llevaron a la exposición de Cezanne. Martina era una fanática de la
pintura, sobre todo la encantaba pintar bodegones y este autor, era su
favorito.
El día terminó y Martina se metió
en la cama con una gran sonrisa, pensando en el maravilloso regalo que le había
hecho su profesora.
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